Los próximos seis meses serán vitales para el proceso negociador, ya que habrá reuniones continuas destinadas a lograr un acuerdo definitivo sobre el programa nuclear iraní y el levantamiento de las sanciones.
Según José Luis Iriarte, Catedrático de Derecho Internacional, y José María Viñals, jefe de operaciones internacionales de Lupicinio Abogados, el bufete que consiguió sacar a dos empresas iraníes de la lista de sancionadas ganando sendos casos ante el Tribunal Europeo, se han flexibilizado algunas restricciones, pero siguen en vigencia el grueso de las sanciones.
La buena marcha de las negociaciones entre Irán y los países del E3/EU+3 ha permitido aprobar la suspensión durante seis meses de algunas de las medidas más restrictivas de las sanciones internacionales.
Irán, por su parte, ha empezado a desconectar las centrifugadoras de uranio, desprendiéndose del que tiene enriquecido al 20% y sometiéndose a inspecciones internacionales.
Según Jose María Viñals, el abogado que lideró el equipo de defensores que sacó a empresas iraníes de la lista de sancionadas de la Unión Europea, hay que tener en cuenta la posibilidad que se abre en cuanto a que las autoridades estatales competentes podrán autorizar la liberalización o la puesta a disposición de fondos o recursos económicos al Ministerio del Petróleo por parte de determinadas entidades sancionadas.
Las negociaciones continúan. Los próximos seis meses serán vitales para el proceso negociador. Habrá reuniones continuas, contactos destinados a lograr un acuerdo definitivo sobre el programa nuclear iraní y el levantamiento de las sanciones, o cuanto menos como señala Viñals, a conseguir un pacto más amplio que el presente, que oriente el camino de una futura solución.
