La repercusión mundial del coronavirus está siendo imparable: ya ha afectado a más de 2.000 personas en el país de origen, China, y más de 70.000 personas se han contagiado en todo el mundo, según Europapress.
Ante todas estas alertas internacionales, un número elevado de empresas decidieron cancelar su asistencia al certamen anual del Mobile de Barcelona, empezando por LG, la primera empresa que anunció su baja al evento el pasado día 5 de febrero. Desde entonces, y después de un continuado listado de bajas, el pasado día 12 de febrero John Hoffman, responsable del MWC20, anunciaba la cancelación unilateral del congreso de la siguiente manera: “El GSMA ha decidido cancelar el MWC20 por la preocupación global que ha generado el brote del coronavirus”
Los daños que conlleva la cancelación del evento tecnológico del año están valorados en casi 500 millones de euros. Estos millonarios gastos afectan tanto a las empresas que estaban contratadas para prestar servicios durante el congreso, como a las que iban a participar. Afecta igualmente a la ciudad de Barcelona, pero, sobre todo, afecta a GSMA, la empresa organizadora del evento.
Ahora toca comenzar la batalla legal para decidir quién se hace responsable de todas las pérdidas, las reclamaciones por los daños causados y todas las solicitudes de indemnización, las cuales abarcarán el lucro cesante, los gastos incurridos e incluso puede que los daños morales.
¿Quién responde de todos estos daños? ¿El seguro de GSMA se hará responsable de una epidemia como el coronavirus, cuando España no ha declarado en ningún momento el estado de emergencia sanitaria? ¿Es realmente el coronavirus una situación de “fuerza mayor”? ¿Cómo va a demostrar GSMA que es una emergencia sanitaria si afirmaron en todo momento que no corría peligro su celebración? ¿Por qué si estamos ante una emergencia sanitaria y, por lo tanto, un estado de “fuerza mayor”, sí que se están llevando a cabo otros eventos en el mundo como la feria de imagen y sonido Integrated Systems Euro en Holanda, el Salón del Motor en Ginebra, o la feria de arte contemporáneo ARCO en Madrid?
Está claro que la respuesta a todas estas preguntas dependerá de las pólizas de seguro establecidas, de lo pactado entre las partes, y del trabajo de los abogados.